martes, 17 de mayo de 2011

En el pueblo

Santa María Egipciaca (Ribera)
Hola, que hemos estado unos días sin poder decir nada. Primero porque, con todo este follón, los blogs no funcionaban y luego porque no me funcionaba el aparatito que me conectaba con internet a través del satélite.
He leído a las amigas y he visto que Blanca, la chica de Santander, también vio un monstruo allí, en pleno paseo Pereda frente al mar, con lo bonito que es aquello con sus barquitos que van a Somo y Pedreña, el pueblo de donde era el pobre Severiano Ballesteros. Y no se me quita de la cabeza lo del viernes, lo del policía que cayó reventado encima de aquel camión.
Nosotras bien, gracias. Hicimos la limpieza de toda la casa el sábado en plan zafarrancho. Rosario me preguntó si en la casa había bodega y sí que la hay, claro, que ahora la uva se lleva a las prensas de la Cooperativa de la Virgen del Mar y de la Cuesta, pero antiguamente, cuando los racimos se pisaban, el mosto iba de la pisadera al lagar de la bodega para que fermentara y luego, allí, ya se distribuía por las cubas. Y lo bueno que tienen esas bodegas bajo tierra, que hubo una época en que a la gente de aquí le dio por cultivar champiñones dentro por lo de la oscuridad, pero lo bueno que tienen es que en verano se está fresco y en invierno calentito. Pues Rosario dijo que bajáramos a la bodega todas las latas de conserva que nos habíamos traído: por si acaso.
-¿Por si acaso qué?
-Yo ya sé lo que me digo, señora Pilar.
Y el sábado, cuando estábamos las dos dale que te dale limpiando, se me puso a contar lo que había andado haciendo por Barcelona para ganarse la vida, que es lo que decían las malas lenguas, pero que no me pensara yo que por eso era mala mujer, que lo uno no va con lo otro. Yo, claro, ya no me escandalizo de nada y mala mujer ya sabía yo que Rosario no era, que se le ve buen corazón y lo que le pasa es que entre lo de su pobre madre y esas cosas que ve en sus pesadillas y en lo que no son sus pesadillas, sufre mucho la criatura.
-Y un caballero me quería retirar del oficio pero le dije que no, que yo no me estoy todo el día encerrada en un piso esperando que el señorito venga. Y cuando pase todo esto me busco un trabajo decente, de cajera de supermercado o de lo que sea. Y cada noche le rezo una oración a Santa María Egipciaca, que es la patrona de las arrepentidas.
Por eso he puesto arriba un cuadro con Santa María Egipciaca como hace Rebeca, la chica de Bilbao, que siempre pone cuadros. Ah, y que ya me he enterado de que ahora su hijo se ha liado con la criada.
Y nada más, que aquí estamos retiradas Rosario y yo.

3 comentarios:

  1. Bien hecho, poner cuadros del patrimonio de la humanidad: propagas cultura, no vulneras derechos de autor, y no promocionas al tipejo de turno que se indigna porque usas su foto, cuando no ganas nada, sólo gana él con la publicidad que le haces.

    Y, sí, mi hijo se ha liado con la criada. Ya ves, es lo más importante que pasa en mi vida, tal como lo cuentas. Si se te ocurre algún consejo que pueda solucionar el tema, agradecida. Cuidaos.

    ResponderEliminar
  2. Te echábamos en falta Pilar y luego, viene bien descansar un poco de esto del blog, porque ya ves que cosas pasan. Ahora os voy a contar lo que he visto hoy en mi tienda, después de todo el lío de ayer. Y Rebeca, te lo digo aquí porque no tengo mucho tiempo. Lo de tu hijo, seguramente, será algo pasajero, ya sabes eso de descubrir el sexo con la persona más cercana que no sea de la familia, algo así como pasa en esa preciosa novela de Sándor Márai que se titula La Mujer Justa y que te recomiendo porque así a lo mejor lo entiendes más fácil.
    Si no le pones impedimentos, seguramente todo acabará como ha empezado. Pero Pilar a lo mejor tiene otra idea, que ella tiene esa sabiduría natural de algunas personas.

    Un besito a las dos.

    ResponderEliminar
  3. Hola, chicas, ya estoy aquí.
    Rebeca: yo no sé lo que son los derechos de autor. Y ya sé que te han pasado muchísimas cosas aparte de lo de tu hijo con la criada. Si es que escribes tanto que cuando llego al final ya me olvido de lo del principio. Pero leí lo del incendio y el achuchón que te dio tu novio antiguo, que ya lo has encontrado aunque en plan misterioso. Y que estuviste en casa de tus padres y ahora estás en un hotel.

    Y Blanca tiene razón: que tu chico se inicie con la criada sudamericana y luego ya, para casarse, que busque a una chica de buena familia.

    Blanca: que ya he leído lo de los destrozos en tu tienda. ¡Qué pena! Pues nosotras aquí estamos en el pueblo por si os queréis venir.

    ResponderEliminar